Las telangiectasias o arañas vasculares son dilataciones venosas de color rojo brillante y de 1-4 mm de diámetro que palidecen a la presión.
Pueden observarse en la cara, mucosas nasofaríngeas y bucales y en extremidades, especialmente las inferiores. Pueden ser idiopáticas, esto es, no vinculadas a ninguna otra enfermedad, o bien ser secundarias a otros trastornos, algunos de ellos graves, como la enfermedad de Rendu-Osler-Weber.
La gran mayoría de ellas son solo antiestéticas y su aparición se relaciona con irregularidades hormonales, embarazos, menopausia o el simple envejecimiento.
No suelen suponer, salvo contadas excepciones, un problema de salud ni comportan riesgo alguno. Sin embargo son muy antiestéticas. Frecuentemente comienzan a aparecer en la cara externa de muslos formando una corona venosa, en cara interna de rodillas y en hueco poplíteo y pueden acabar extendiéndose por toda la extremidad inferior. Son poco frecuentes en tórax y abdomen pero son mucho más visibles en la cara, especialmente en aletas de la nariz y pómulos.
Suelen asociarse a otro tipo de dilataciones venosas: las varices reticulares, de color azulado y diámetro algo mayor que las telangiectasias.
Ninguna de estas dilataciones venosas se conviertan en las grandes varices, ni tienen riesgo de flebitis o ulceraciones de la piel, aunque durante los embarazos suelen producen mucha pesadez, calor local y a veces dermatitis.
Desde un punto de vista estrictamente de salud la mayoría no precisa ningún tratamiento, tan solo aquellos casos en que se padezcan los síntomas antes indicados. En estos casos la combinación de medias elásticas de compresión normal y venotónicos suele ser suficiente.
Desde un perspectiva cosmética los tratamientos han cambiado en los últimos años y los mas eficaces son los realizados con técnicas combinadas de esclerosis mas láser, consiguiéndose de esta forma hacer desparecer estas arañas vasculares de una forma más rápida y más prolongada.
En todo caso ningún tratamiento es capaz de evitar la aparición renuevas arañas vasculares con el tiempo porque hoy por hoy no hay ningún tratamiento capaza de frenar el envejecimiento de nuestro organismo. Es decir, todos estos tratamientos solo sirven para aliviar las molestias, en caso de que las haya, y mejorar el aspecto de nuestras piernas o cara, que es donde principalmente las encontraremos.